Continúan las investigaciones, las amenazas y los descubrimientos de todo lo que rodea al famoso pueblo y a sus habitantes, incluida la sospecha de canibalismo

Después del incidente sucedido al final del primer volumen, parece que llega un poco de tranquilidad a Kuge y al hogar de Daigo. Los vecinos parecen estar contentos con la llegada y actuación del nuevo oficial de policía, el supuesto agresor y asesino se entrega a las autoridades y todo el pueblo junto a sus habitantes se prepara para el próximo festival.

Aunque dicen que la procesión va por dentro y Daigo no deja de recordar cierto incidente que tuvo hace años en su antigua comisaría, ya que tuvo que actuar con violencia extrema en un caso de abusos sexuales, en donde incluso su hija estuvo involucrada de cierta manera, marcándoles a ambos de por vida.

Siguiendo el dicho de la calma que precede a la tormenta, eso sucede cuando la familia de los Gotô se reúnen con Daigo para decirle que los vecinos de Kuge pueden tener algo de culpa sobre el suceso que ocurrió a su compañero. Siendo a partir de aquí que comenzará una investigación general, tanto para los habitantes del pueblo como a la familia de los Gotô, sacando al gran detective que lleva dentro Agawa.

Comenzando por fijarse minuciosamente en todo lo que ocurre a su alrededor, viendo y sufriendo la frialdad de los pueblerinos, profundizando en las leyendas que rodean al pueblo, sacrificios humanos, desapariciones, rituales e incluso canibalismo. Conseguirá reunirse con diferentes personalidades que ya están fuera de Kuge, pero que han sufrido en alguna medida parte de esos rituales, perpetrados en ese famoso y próximo festival.

Cerrando más el círculo de la investigación, ganándose aún más la desconfianza de todos, pero ganando confianza en sí mismo, reforzará su actitud de afrontar el siguiente paso, conseguir que los Gotô se pronuncien, llegar a encontrar al confidente secreto que colaboró con el antiguo oficial de policía y descubrir de una vez por todas qué es lo que ocurrió en la muerte de Kanô.

OPINIÓN

Seguimos disfrutando del buen hacer de Masaaki Ninomiya, en donde sigue manteniendo en vilo todos esos secretos que rodean los volúmenes, sin decaer en lo aburrido y sacando a relucir su imaginación de posibilidades. Con una narración que se toma su tiempo, como es habitual, que desgrana poco a poco las pistas, pero dándonos otros secretos, unos diálogos que sabe mezclar entre lo siniestro, el drama y el humor, sin caer en los tópicos, muy ágil y una estructura de lectura rápida.

En el dibujo también se mantiene muy bien, con esos toques realistas, expresivo en todos los aspectos, una narrativa que fluye a cada página. Mantiene también la estructura de viñetas por página no muy abusivas, dándonos todo lo necesario y sobre todo sorprendiéndonos con alguna única viñeta por página que hará que nos removamos en el asiento. Refleja perfectamente la crudeza de algunas escenas, sin llegar a ser grotesco, pero sí enfatizando en lo sucedido.

En definitiva, un manga de lo más completo, tanto por historia como por dibujo, que sabe mezclar géneros, con cosas típicas, pero no tópicas, eso sí, para fans del suspense y la intriga, con un dibujo que nos recordará a los grandes maestros. Se ha convertido en uno de los imperdibles del año y que no puede faltar en la mangateca de nadie.

EDICIÓN

Publica Arechi Manga de la edición original de Nihon Bungeisha, Gannibal vol.2 y vol.3. Publica en formato Tankobon, Rústica con Solapas a un tamaño de 12,8×18,2cms, en Blanco y Negro con 208pags c/u y un precio de 9€ cada unidad.